
Hoy no ha pasado mucho tiempo, sigue siendo un artista joven con sólo 23 años y madurez quizá no es el calificativo que se le pudiese dar al sonido de Youth Lagoon, más bien, el sonido se ha transformado. La transformación del proyecto coloca a Trevor ya no entre los artistas con un pequeño disco realizado en una casa, sino un proyecto producido por Ben H. Allen; quien ha trabajando para artistas como Animal Collective, Cee-Lo Green, Deerhunter y Delphic. Esto explica la evolución del sonido, pero de manera lírica, el contenido de cada canción ya no está enclaustrado ni tiene el sentimiento escapista que se percibía en "The Year Of Hibernation".
Desde el momento que comienza "Wondrous Bughouse" se anuncia la diferencia, pues, luego de pasar el intro, "Mute", la primera canción del álbum estalla con baterías y un sonido bastante grueso que en su álbum anterior jamás habría sido posible. En "The Year Of Hibernation" cada canción comenzaba callada y con el tiempo iba robusteciendo su sonido, el caso de "July", hermosa pero calmada y paciente. "Mute" desde el inicio explica el sonido a través de la primera línea de la canción, "Living in a 3D world", el sonido estalla mucho más tridimensional y complejo.
"Attic Doctor", "Pelican Man" y "Sleep Paralisis" son los momentos que me hacen recordar a MGMT si trabajaran con una línea de producción un poco menos limpia. Son canciones con samples de cajas de música, pianos y mucho juego de eco y sonidos espaciales acompañados de guitarras ligeramente desafinadas con sonido trémolo. Si bien el sonido sigue apostando hacia el dream-pop, en muchas ocasiones, el discurso comunica un viaje psicodélico.
La primera canción que llegó a conocerse del álbum due "Dropla", aunque no era tan instantáneamente diferente al material anterior como "Mute", lo interesante de "Dropla" es la claridad de la letra sin perder lo nebuloso de la instrumentación. Las imágenes son muchísimo más abstractas y espirituales "You're playing a song, one that's for me / While my physical body is turning in my grave" antes del coro repetido de "You'll never die", sin duda un cambio de composición que acompañado de la claridad en la producción alcanza un nivel al que no llegaría con la timidez de su álbum anterior.
"Raspberry Cane" es otra canción que sin duda resalta en su complejidad y por comenzar con amplitud sonora que lanza a un estado mental concreto, sin sugerir nada con música que suavemente te lleva a un lugar. Estas canciones están destinadas a lanzarte al mood de Powers de forma instantánea.
El efecto logrado por Youth Lagoon en esta entrega es un experimento sonoro disímil al hecho por Tame Impala en "Lonerism" y un Dream-Pop trascendental que se aleja del susurro de "MBV" hecho por My Bloody Valentine.
En éste álbum la fragilidad y vulnerabilidad siguen ahí pero potenciadas por millones de detalles que se aprecian cuando se sube el volumen con audífonos. Escuchaba el álbum mientras caminaba por la ciudad de la misma manera que hice con el anterior y la diferencia es que antes tenía que detenerme, huír y escuchar; esta vez la música me invita a ver el mundo a apreciar mi alrededor. El disco anterior logra ese efecto invernadero, mientras que "Wondrous Bughouse" es una experiencia totalmente diferente, más que introspectiva: contemplativa.
Tracklist:
1. Through Mind and Back
2. Mute
3. Attic Doctor
4. The Bath
5. Pelican Man
6. Dropla
7. Sleep Paralysis
8. Third Dystopia
9. Raspberry Cane
10. Daisyphobia
Rate: 9/10
No comments:
Post a Comment